¿Hay un momento perfecto para decir las cosas?
Nunca hay un momento perfecto para tener esa conversación que intuyes será incómoda. Esa es la verdad.
Pero te ronda la cabeza, a veces se te olvida, y cuando recuerdas que tienes esa tarea pendiente sientes como si te pegaran una colleja. Menuda pereza.
Si guardas cierto rencor, si tienes algo importante que comunicar, si quieres confesarle eso que tanto te molesta, o si al fin te has decidido a decirle la verdad, no esperes el momento perfecto, no lo hay. Elige un momento concreto y lánzate.
Te aseguro que aunque pueda ser incómodo, la paz que da soltarlo no tiene precio. Te quitas un pesazo de encima.
Recuerda que lo que no se dice voluntariamente con buenas palabras, se acaba diciendo más adelante con palabras peores.